Uno.

El Amor siempre me sorprende.

Son las ideas que hago con él lo que hace que entre el miedo,,casi diría pánico, ya que
cualquier cosa que se aleja de mi idea de lo que significa el amor, es una valla que interpongo entre la realidad y yo.

Pero me encanta superar las mismas leyes que interpone mi ego, pues una vez suelto descubro otra idea perdonada tras la inial que hizo que perdiera el centro de mi ser, de mi paz.

El Amor, son estas etapas que compartimos con cada ser que se cruza en nuestro camino, ya sea de forma física o de forma mental, no existe la diferencia para esto, ya que al no ser un cuerpo,,la idea pasa a ser real en mi mente y, con esto se convierte en real para mi experiencia.

La ingenuidad a veces me hace pasar por ideas prefabricadas de que lo que es real para mi idea, lo es también para otras ideas, y así descubro que mi ilusión era falsa, solo es real en mi mente la cual no distingue entre diferentes formas.

Pero esto es hermoso, ya que abre mi mente limitada a soltar cualquier idea o forma ( no sé lo que es mejor para mí) y descubro una gran obertura en mi corazón al permitir que sea lo que es, y no, lo que yo hago con lo que me sucede, pues en los fragmentos de una conciencia hay millones de ideas, en cambio cuando entras en el corazón de Dios, allí todo es distinto, no hay formas, no hay vallas ,y, ni un fragmento queda suspendido, son uno, y en esta unidad, la intensa luz borra cualquier idea fragmentada de una ilusión limitada.

El Amor es Amor.